Generando conciencia en las aulas.

Por Marcela N. MéndezMarce N Mendez Yo amo meditar

Una hermosa experiencia  pedagógica realizada hace un tiempo con Ibis Consultora.

Hacer pensar, reflexionar a un adolescente, no es una tarea fácil… Proponer una práctica meditativa durante el taller sobre salud, a un grupo de noventa adolescentes entre catorce y quince años parecería una tarea imposible de realizar, doy fe, no lo es.
amistad Yo amo meditarCreo que todo depende de la actitud de los adultos que guían la tarea; si los rotulamos y decimos antes de comenzar:“no se puede“, “imposible”; posiblemente no tendremos los resultados esperados. Pero si abordamos la tarea con la seguridad y certeza que emanan de la experimentación personal y de esa necesidad interna de transmitirles a nuestros chicos que se puede cambiar, que la mente puede ser educada, que se puede elegir pensar o se puede elegir sentir, que la clave es saber elegir para aprender a ser, entonces la perspectiva cambia de manera abismal… Pero cuando, una tarea que puede ser meramente informativa – y muy aburrida-, se transforma en un propósito interno, en un desafío para el docente; la actividad toma otra dimensión, otro significado, y se convierte en algo trascendente para el educador y para los chicos.

Es un momento mágico donde se genera un contacto real con el otro a través de una charla cálida, inteligente y amena, que puede cambiar el rumbo de sus vidas; y a través de la reflexión guiada, llegar todos juntos a la conclusión, que se puede elegir cómo “ser” y “estar” en el mundo.

Esta actividad, que parece salida de un cuento fue el cierre perfecto del Taller sobre salud dirigido a adolescentes que realicé junto a IBIS Consultora, el día 20 de noviembre del 2009 y los alumnos de primer año -un total noventa chicos- de la Escuela Dr. E. Romero Brest, en Ingeniero Budge, provincia de Buenos Aires.
En nuestro taller para adolescentes propusimos, entre otras actividades, una reflexión grupal guiada donde los chicos a través un diálogo semi-dirigido, pudieron reconocer fácilmente los factores más importantes que intervienen en la salud de las personas, pudiendo construir a partir de sus vivencias e ideas previas qué significa estar sanos y cómo pueden acceder a este estado en forma cotidiana. Durante el taller apuntamos permanentemente a generar en ellos la autoconciencia a través del sentido real de la responsabilidad personal y el poder que cada uno tiene de elegir transformar hábitos negativos que los alejen de la salud, en hábitos positivos o acciones responsables para proteger y preservar su salud y la de sus semejantes.

Les propusimos realizar una tarea de autoanálisis guiado donde ellos debían identificar en sí mismos o en otras personas cuáles son las emociones constructivas y cuáles las emociones destructivas, basando esta actividad en nuestra creencia  que la salud no comienza y termina sólo en el cuerpo físico.

Para nuestra sorpresa, no necesitaron mucha guía y llegaron rápidamente a la conclusión que es importante conocer e identificar las emociones negativas que nos perjudican, si queremos tomar el control de nuestras vidas para poder conservar la salud física y mental.

Para el momento del cierre, ante el asombro de los chicos -y de algunos docentes- los invitamos a realizar una práctica de relajación y concentración. Los chicos, naturalmente se dispusieron a cerrar los ojos y escuchar con atención la voz que los guiaba. Estamos hablando de dos turnos de cuarenta y cinco chicos cada uno. Si!! Estaban meditando!!meditacion escuelas. Yo amo meditar
Esta tarea final tuvo como propósito acercarles la experiencia que existe un camino distinto y que es posible para todos, que las respuestas están a la hora de buscar… que se pueden encontrar en los libros, pero que muchas de ellas las debemos aprender a buscar dentro nuestro. De esta manera, a través de la charla y reflexión, sembramos en su interior la confianza, la esperanza y la fortaleza necesarias para enfrentar su propio crecimiento, que pensar en positivo es una elección inteligente y que pueden elegir un proyecto de vida -más allá del condicionamiento social-cultural o económico- que los enaltezca como seres humanos.
Nuestros pilares de trabajo fueron la educación emocional – materia pendiente todavía en las escuelas-,  la autoconfianza y la autovaloración  con conciencia; es decir, en palabras simples, sembrar algo de luz en ellos, ponerlos en conocimiento que tienen el derecho a la libertad, por eso pueden elegir ser , y que estas elecciones no serán las correctas si no asumen la responsabilidad de sus acciones. Que ese principio de la libertad implica poder tener la posibilidad y oportunidad de cambiar el rumbo de la historia personal y familiar.

docenteSer docente es algo sagrado, debemos ser conscientes que tenemos entre las manos el poder llegar a los chicos, el poder de transformarlos, de cambiarles el pensamiento, la forma de ver las cosas, esto es muy valioso en la vida de las personas…

Entonces, cada vez que estemos frente a ellos, recordemos siempre que podemos hacer algo, que podemos realizar un cambio; no nos olvidemos que el ser humano es un ser realmente extraordinario que puede ser condicionado en la vida, pero si recibe un mensaje a tiempo, no se va a dejar vencer por las circunstancias, mientras crea en sí mismo y en sus posibilidades.